¿Tienes el pelo seco y estropeado? Puede ser muy molesto. Mucha gente lo sufre. Pero, ¿y ahora qué? Utilizando los productos adecuados, puedes tener un cabello sano, bonito y brillante.
¿Qué es el cabello seco y dañado?
La superficie del cabello está formada por cutículas capilares, que permiten que la humedad se almacene correctamente en el cabello. En el cabello sano, estas cutículas se superponen, de modo que la capa externa del cabello está bien cerrada. Cuando las cutículas están dañadas, se abren y puede alterarse el equilibrio de humedad. Esto puede hacer que el pelo se seque. Además, las cutículas abiertas y dañadas hacen que el pelo parezca apagado, encrespado y menos brillante.
¿Cuáles son las causas del cabello seco y dañado?
El pelo se puede dañar de varias maneras. Suele ocurrir porque se utilizan productos inadecuados o no se cuida el cabello correctamente. Las fluctuaciones hormonales también pueden contribuir al cabello seco y dañado, ya que provocan una falta de sebo en el cuero cabelludo. El cabello dañado se debe a causas como:
Utilizar productos inadecuados
Muchos productos contienen sustancias desengrasantes fuertes como SLS o alcohol, estas sustancias hacen que la producción de sebo del cuero cabelludo cambie. En nuestro cuero cabelludo hay glándulas sebáceas (glándulas sebáceas). La producción de sebo y grasa es necesaria para mantener la piel sana y protegerla de infecciones y bacterias. Por ello, elija siempre productos que no contengan sustancias nocivas para que la producción de sebo del cuero cabelludo se mantenga normal y el cabello y el cuero cabelludo permanezcan nutridos.
Alteración de la producción de sebo
A veces la producción de sebo no es la que debería ser, por ejemplo, el cuerpo produce demasiado o muy poco sebo. Las fluctuaciones hormonales, por ejemplo, pueden reducir la producción de sebo, lo que reseca el cabello. En ese caso, puedes utilizar temporalmente productos de cuidado extra como apoyo.
Lavar el pelo con demasiada frecuencia o de forma inadecuada
Lavarse el pelo demasiado a menudo o muy poco puede provocar un exceso de sebo y un cabello graso. Además, utilizar acondicionador en exceso o de forma incorrecta puede hacer que el pelo se vuelva graso y quebradizo rápidamente. Si lavas el pelo y el cuero cabelludo con demasiada frecuencia, modificas la producción de sebo, lo que puede provocar que el pelo se seque gravemente.
Calor y/o peinado
También el uso frecuente de secadores, rizadores y planchas puede provocar sequedad y fragilidad en el cabello. El cabello se compone en gran parte de humedad. El calor de estas herramientas quema la humedad del cabello y puede provocar que se seque. Esto daña la cutícula y altera el equilibrio de humedad del cabello. Si utilizas un producto que te proteja del calor, evitarás que tu cabello se reseque. Un producto protector del calor como la Leche de Seda de Abisia forma una capa alrededor del cabello para que no se queme la humedad.
Tratamientos químicos
Teñirse, decolorarse o hacerse la permanente con regularidad modifica la composición del cabello. Estos tratamientos pueden dañar las cutículas capilares, provocando que el pelo se reseque y se estropee. Por lo tanto, es importante cuidar bien el cabello incluso con este tipo de tratamientos.
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¿Cómo prevenir el cabello seco y dañado?
Para prevenir el cabello seco y dañado, es importante utilizar los productos adecuados y utilizarlos de la forma correcta. Lo mejor es utilizar un champú suave y nutritivo como el champú hidratante Abyssian. Este champú repara e hidrata el cabello y repara las puntas abiertas. Lava siempre previamente el cabello una vez con una pequeña cantidad de champú para eliminar la suciedad inicial del cabello y el cuero cabelludo. Después, vuelve a lavar el cabello con una cantidad generosa de champú. Un champú abre las cutículas capilares para que los principios activos puedan penetrar correctamente en el cabello. Un champú nutritivo también cuida el cuero cabelludo y elimina la grasa y la suciedad del cabello.
Después de lavar con un champú acondicionador y abrir las cutículas capilares, es bueno utilizar un acondicionador de calidad. Para no apelmazar el cabello, es mejor utilizar el acondicionador sólo en las puntas y los largos, y no en las raíces ni en el cuero cabelludo. También es muy importante lavar bien el acondicionador.
Para dar un impulso extra a tu cabello, puedes utilizar una mascarilla capilar de nutrición intensiva cada dos o tres semanas. Combinando un champú y un acondicionador con una mascarilla capilar, aportas un extra de hidratación y reparación al cabello seco y dañado. Así, el cabello recibe todos los ingredientes necesarios para volver a estar sano y brillante.
